HONESTIDAD




·         El amor es paciente  es bondadoso, nunca envidia, y tampoco presume, no es orgulloso. No es indecente, no es egoísta ni interesado.     No se molesta fácilmente no suele grabar todos los errores, el amor no tomo placer en el mal pero se alegra con la verdad.   
 El amor siempre protege, siempre confía,  siempre ilusiona, y nunca jamás se vence   el amor nunca falla.





Es una cualidad humana que consiste en comportarse y expresarse con coherencia y sinceridad, y de acuerdo con los valores de verdad y justicia. En su sentido más evidente, la honestidad puede entenderse como el simple respeto a la verdad en relación con el mundo, los hechos y las personas; en otros sentidos, la honestidad también implica la relación entre el sujeto y los demás, y del sujeto consigo mismo.
Dado que las intenciones se relacionan estrechamente con la justicia y se
relacionan con los conceptos de "honestidad" y "deshonestidad", existe una confusión muy extendida acerca del verdadero sentido del término. Así, no siempre somos conscientes del grado de honestidad o deshonestidad de nuestros actos: el auto-engaño hace que perdamos la perspectiva con respecto a la honestidad de los propios actos, obviando todas aquellas visiones que pudieran alterar nuestra decisión.



UNA OCASIÓN ESPECIAL….

Mi amigo abrió el cajón del armario de su esposa y levantó un paquete envuelto en papel de seda. “esto no es un simple paquete”, dijo, es lencería fina.
Tiró el papel que lo envolvía y observó la exquisita seda y el encaje.”Ella compro esto la primera vez que fuimos a Nueva York, hace más o menos 8 a9 años… nunca lo usó. Lo estaba guardando para una ocasión especial. Bueno, creo que esta es la ocasión”.
Se acerco a la cama y coloco la prenda junto con la otra ropa que llevaría a la funeraria. Su esposa había muerto.
Dirigiéndose a mí, dijo: “N o guardes nada para una ocasión especial. Cada día que vives es una ocasión especial”. Todavía pienso en esas palabras. Han cambiado mi vida. Ahora leo más  y limpio menos. Me siento en la terraza y admiro el panorama sin fijarme en las malas hierbas del jardín. Paso más tiempo con mi familia y amigos y menos tiempo en el trabajo.
He comprendido que la vida debe ser un patrón de experiencias para disfrutar, no  para sobrevivir. Ya no guardo nada. Uso mis copas de cristal  todos los días.Me pongo mi saco nuevo para ir al supermercado, ya no guardo mi mejor perfume para fiestas especiales. Lo uso cada vez que me provoca hacerlo. Las  frases “algún día”  y “uno de estos días” están desapareciendo de mi vocabulario. “Si vale la pena  verlo, escucharlo o hacerlo, quiero verlo escucharlo o hacerlo ahora”
No estoy seguro, qué hubiera hecho la esposa de mi amigo, si hubiera si hubiera sabido que no estaría aquí para el mañana.  Que todos tomamos tan a la ligera. Creo que hubiera llamado a sus familiares y amigos cercanos. A lo mejor hubiera llamado a algunos antiguos amigos para disculparse y hacer las paces por posibles enojos del pasado. Me gusta pensar que hubiera ido a comer lo que más le gustaba.
Son esas pequeñas cosas “dejadas de hacer” las que harían enojar si supiera que mis horas están limitadas; porque dejé de ver a buenos amigos con quienes me iba a poner” algún día”; porque no escribí ciertas cartas que pensaba escribir “uno de estos días”; porque no escribí ciertas cartas que pensaba escribir “uno de estos días”; triste porque no le dije a mis hermanos y a mis hijos con suficiente frecuencia cuanto los amo. Ahora trato de no retardar, detener o guardar nada que agregaría risa y alegría a mi vida. Y cada mañana me digo a mi mismo que este día es especial. Cada día, cada minuto, cada hora es especial.


·         El  cuerpo tiene una capacidad milagrosa para curarse a si mismo.  (Hipòcrates)